Rosas blancas

Una mañana al despertar,
quise abrazarte y ya no estabas.
Miré a la puerta y te encontré, con tus maletas arregladas.

Sin preguntarte te escuche,
dijiste que te marchabas,
que ya tu amor no existe en mí,
que te perdone y que es mejor así,
que continuar en mi morada.

Esa mañana te perdí, al comprender que me dejabas,
me diste el cuerpo y no el amor,
te di mi vida cuerpo y alma.

Y pensar que te quise,
como a nadie ame en la vida,
puse luto en mi cama y en mi memoria,
rosas blancas.

Busque la posibilidad de tu ser motivar para que te quedaras,
tal vez para ti fue muy poco este amor que de un loco como yo te brindara.
Mas el fuego más el fuego y la humedad que tú me dabas, era falsa,
aunque gustaba, comprobé que no me amabas. Esa mañana, te perdí al comprender que me dejabas,
me diste el cuerpo y no el amor,
te di mi vida cuerpo y alma.

Y pensar que te quise,
como a nadie ame en la vida,
puse luto en mi cama y en mi memoria rosas blancas.

Ah ha, ha ha, ha ha, ha ha, huhuu
ah ha, ha ha, ha ha, ha ha, huhuu