Rendido en tus manos

Basto mirarte
para que sufriera un giro mi existencia
para no sacarte ya de mi cabeza
fue tan fácil convertirte en mi obsesión.

¿Cómo saberlo?
que estaba entre los brazos de una falsa experta
que usa su belleza como arma perfecta
y te envuelve hasta que no te queda más opción.

¿Y cómo evitarlo?
si soy completamente adicto a tus labios
pensar en no mirarte no está contemplado
aunque de por medio este mi perdición.

Malditos sean tus besos
que en un instante se adueñaron de todos mis pensamientos
que me envolvieron hasta hacerme parte de tu tonto juego
maldito el brillo de tus ojos bellos. Maldito sea tu cuerpo
que como diosa de la seducción incitas al pecado
eres la imagen de la perfección y como resultado
tienes mi mundo rendido en tus manos.

Malditos sean tus besos
que en un instante se adueñaron de todos mis pensamientos
que me envolvieron hasta hacerme parte de tu tonto juego
maldito el brillo de tus ojos bellos.

Maldito sea tu cuerpo
que como diosa de la seducción incitas al pecado
eres la imagen de la perfección y como resultado
tienes mi mundo rendido en tus manos.