Quimera

En medio de la noche,
entre sombras y oscuridad,
me dirijo a apresar
a un infiel acusado de matar.

Entre la niebla puedo ver
a una joven belleza que irradia poder.
Me enviaron a cazar a una mujer.

Siempre recordaré cuando la encontré
mirando hacia el cielo.
Ella y su corazón no tienen temor
de ser prisioneros.

Imposible salvarla,
es llevada hasta el centro de la perdición.
Donde juzgan sólo por juzgar,
donde ya es condenada, la deben quemar.

En la celda puedes ver
las paredes con sangre que encierran su ser.
Si tan sólo las pudiera romper.

Siempre recordaré cuando la encontré
mirando hacia el cielo.
Ella y su corazón no tienen temor
de ser prisioneros. Al presenciar tanta barbarie sin cesar,
me lancé contra los creadores de esta falsa criminal.
Sin contemplaciones, la sangre hice correr.
Con espada en mano, lancé el corazón al fuego.

En ningún lugar había encontrado ese mirar
y ese gran valor que se enfrentara a la muerte sin miedo.
Impredecible imaginar su fin.
Soledad, entrégale libertad.

Pasan las noches, voy cuidando su dolor,
pero su corazón ya no responde.
Quimera del viento, ahora regresas a tu hogar.
Es aquel lugar donde por siempre existirás.

Llegará el día en que por fin me una a ti.

Siempre recordaré cuando la encontré
mirando hacia el cielo.
Ella y su corazón no tienen temor
de ser prisioneros.

Siempre recordaré cuando la encontré
mirando hacia el cielo.
Ella y su corazón no tienen temor
de ser prisioneros.