Ocaso eterno

[Stefano Mac & Felipe Guedes]
[Estribillo]
Desde que te fuiste el sol ya no sale,
ya no sale, ya no sale.
Desde que te fuiste el sol ya no sale,
ya no sale, ya no sale.

Desde que te fuiste el sol ya no sale,
no está tu pelo que amortigua los rayos solares.
Desde que te fuiste el sol ya no sale,
ya no sale, ya no sale.

[Stefano Mac]
La ciudad vive en penumbra porque el sol ya no sale,
no está tu pelo donde reposaban rayos solares.
Cuando te fuiste te siguieron los colores, las fragancias de flores,
mis temores se volvieron reales.

Tu energía vital era la fobia de mis miedos,
al saber que te fuiste al instante ellos volvieron.
Los paisajes ya no se dejan ver al saber que tu sonrisa no los decora,
las neblinas se escondieron. Ya no he visto picaflores, solo flores que pican.
Éstas afilan sus espinas a medida que ser marchitan.
Las palomas blancas se convirtieron en ratas,
la Luna se volvió opaca porque tu reflejo necesita.

Los pájaros no cantan, están deprimidos.
Desde que te fuiste el bullicio volvió a tener sonido.
Mariposas se escaparon, ahora cuervos me consumen,
desde que no está tu perfume respirar se volvió aburrido.

[Stefano Mac & Felipe Guedes]
[Estribillo]
Desde que te fuiste el sol ya no sale,
ya no sale, ya no sale.
Desde que te fuiste el sol ya no sale,
ya no sale, ya no sale.

Desde que te fuiste el sol ya no sale,
no está tu pelo que amortigua los rayos solares.
Desde que te fuiste el sol ya no sale,
ya no sale, ya no sale. [Stefano Mac]
El sol ya no sale, el cielo ya no brilla.
Las hojas no se mueven aunque el viento las acaricia,
Sé que me están devorando mientras recuerdo tu sonrisa,
y es que el tiempo es el más fuerte en la cadena alimenticia.

El sol ya no sale, las estrellas tampoco,
pues su único objetivo era reflejarse en tus ojos.
Enamorarse de la vida es un acto peligroso,
y más sabiendo que la muerte tiene un corazón celoso.

Dónde sea que esté, espero que se encuentre bien,
que aún sigo con la ilusión de que vaya a volver.
Que aún tengo su recuerdo dibujado en mi sien,
y que sin ella cualquier melodía se convierte en réquiem.

Dichoso es el lugar en el cual te encuentras parada,
con tu sonrisa marcada y tu cabellera iluminada.
Aún así estaré esperando tu ardiente llegada,
y lo sabré cuando el sol nuevamente me alce su mirada.

[Stefano Mac & Felipe Guedes]
[Estribillo]
Desde que te fuiste el sol ya no sale,
ya no sale, ya no sale.
Desde que te fuiste el sol ya no sale,
ya no sale, ya no sale.

Desde que te fuiste el sol ya no sale,
no está tu pelo que amortigua los rayos solares.
Desde que te fuiste el sol ya no sale,
ya no sale, ya no sale.