No ruegues por mi alma

Tropiezo camino al centro
Con un caballero esbelto de traje y sombrero
Me pregunta con acento extranjero
¿Quieres fama y dinero? “Por tu alma yo te concedo”
Cuesta arriba por el empedrado
De una esquina brota una hembrota, vestido ajustado
Me susurra al oído
“Nene vente conmigo” que en la entraña ardiente es más divertido

No ruegues por mi alma
No ruegues por mi alma
Pues prefiero la quinta paila allá me esperan mis amigos, rock y juegos prohibidos

Recordaba a mi abuela la Señora Carmela
Que me dijo “cuidado con este tipo”
Te lo encontrarás un día ofreciendo maravillas
Pero todo será una mentira
La verdad es que prefiero asumir el riesgo
Y si así es el infierno yo me condeno
Que quedarme aburrido en una nube como un niño
Cargando el arpa por el infinito “Ladies and gentlemen, bienvenidos a la quinta paila, por su lado izquierdo esta el casino y los juegos de video. Adelante fiesta en la playa y la sala de las chicas malas, que hará que se sienta como en el cielo. A su derecha las estrellas de rock en concierto y la biblioteca de los poetas muertos”