No hay derecho

No hay derecho a que mi padre trabaje 14 horas
cada día y que su sueldo siempre llegue con demora.
No hay derecho a que Casillas gane en 2 minutos
parando un balón lo que no gana mi padre en toda su vida.
Que digan que no hay dinero para pagar a los trabajadores,
¿y sí lo hay para fichar a los mejores?
No hay dinero para el peón, el carpintero, ni el pintor,
pero sí para concursos televisivos en rigor.
No hay derecho a que nos bajen los sueldos,
a que nos suban los precios, a que nos cobren por todo
y que tengamos que pagar siempre por nada.
La crisis se nota en tu cartera,
pero muchísimo más en tu mirada.
No puede ser que mi familia no tenga un triste capricho,
que tengamos que pagar para acabar dentro de un nicho.
Cada vez es menos la gente que puede seguir,
y más los que gritamos en vano, aunque nadie nos quiere oír. [Estribillo]
No hay derecho
a seguir con esta desigualdad
No hay derecho
a combatir con miedo la realidad
No hay derecho
a que no ofrezcan ninguna oportunidad
No hay derecho
a que no digan nunca la pura verdad
No hay derecho
No hay derecho sin más,
nadie nos va a escuchar,
de momento sigo y grito rogando piedad.

No hay derecho a que mi madre tenga que estar siempre en casa
sin salir, por el dinero, que sólo la hace sufrir.
No hay derecho a que lo poco que nos dan
sea para pagar recibos; la luz, el agua, la basura y el gas.
Que tenga que ser testigo de cómo mi propio hermano
no logra reunir dinero para abastecer sus pagos.
Que mi sobrina crezca en medio de esta crisis
y que yo no tenga ni para darle un solo regalo.
Ya basta, ¿no?
Dejad de jugar con nuestras pobres ilusiones,
sólo quiero vivir y no sobrevivir, volar.
Y digo pobres ilusiones porque
con este nivel de vida no se puede ni soñar.
No hay derecho a que 50 cent tenga millones y millones
por una sola canción, ¿o sí?
Dime si me equivoco, pero no estoy de acuerdo con estas cosas,
y no es por nada, ¿sabes?, pero también soy MC. [Estribillo]
No hay derecho
a seguir con esta desigualdad
No hay derecho
a combatir con miedo la realidad
No hay derecho
a que no ofrezcan ninguna oportunidad
No hay derecho
a que no digan nunca la pura verdad
No hay derecho
No hay derecho sin más,
nadie nos va a escuchar,
de momento sigo y grito rogando piedad.

No pedimos nada más que aquello que nos corresponde,
conocemos el problema, ellos también, pero lo esconden.
Escúchame una vez; yo sólo quiero lo que es mío,
y si el gobierno no lo entiende es porque no sufre el vacío.
Somos gente honrada, simple, con una vida sencilla,
y sólo nos queda esperar a que esto cambie.
Seré fiel, y si seguimos en las mismas, si no vemos soluciones,
es porque el culpable de esto nunca estuvo en nuestra piel.