Muñeco gris

Dicen de la historia de un muñeco
Que se llamaba Gris
El tenía en su vida un deseo
Quería ser feliz
Esa felicidad buscó en tantas cosas
Y no la encontró
Fiestas, alcohol y otros vicios
Nada lo llenó

Hasta que a Jesús el encontró y toda su vida restauró
Hasta que a Jesús el encontró y con su sangre y agua lo sanó

Jesús cambió la vida del muñeco
Que ahora es feliz
Vive hoy su sueño bien despierto
El puede sonreír
Todos los vicios que eran su refugio
Atrás él los dejo
Pues su vida la tiene completa
Cristo la llenó

Porque a Jesús el encontró y toda su vida restauró
Porque a Jesús el encontró y con su sangre y agua lo sanó

No te olvides que tu vida es un tesoro que el Señor te regaló, no la desperdicies más.
El muñeco Gris creía que todo había perdido, mas vio la luz y al fin pudo entender
Que no todo es como parece y que por más que pese
“Todo me es permitido pero no todo me conviene”.
Su vida no le tenia sentido