Mi desgracia más rubia

Eres preciosa, obediente, lista, guapa y complaciente
Una Lolita caliente, ingenua, poderosa, inteligente
Una gatita perdida, ven, yo te daré un poco de leche
Tan luchadora y sencilla, pero no eres suficiente

Era una tarde de mayo cuando te pedí tormento a gritos
Y te paré por la calle exigiendo un hueco en tu ombligo
Claro que sí, comenzaste, mientras se abrían el mundo y
mis piernas
Si me hacías sentir tan grande, ¿por qué ahora soy tan pequeña?

Me has sacado de casa y de quicio, te has llevado mi falda
y mis ganas
Abriendo cremalleras y abismos, me has dejado sin ropa
y sin nada
Vas a ser mi desgracia más rubia, yo me iré sin dejarte
más pistas que mi sombra
Si muerdes mis labios cogeré el avión tan deprisa
que no dejaré rastro de mi cuerpo en tus manos Otros vendrán en mi sitio y perderán pendientes en tu cama
Tú les dirás muy bajito “eres la primera que traigo a casa”
Se caerá al suelo una copa y verás la guitarra en esa esquina
Cerrarás los ojos fuerte y sabrás que yo te salvé la vida

Y no te sientas mal ni pongas esa cara
Que ya te lo advertí, yo sólo escribo si me enfadan
No me mires así, tus ojos me sobrepasan
Y yo no sé mezclar el sudor y el alma

Me has sacado de casa y de quicio, te has llevado mi falda
y mis ganas
Abriendo cremalleras y abismos, me has dejado sin ropa y
sin nada
Vas a ser mi desgracia más rubia, yo me iré sin dejarte
más pistas que mi sombra
Si muerdes mis labios cogeré el avión tan deprisa
que no dejaré rastro de mi cuerpo en tus manos
de mi mundo en tus manos