Mala costumbre

Tu egoismo no me deja
olvidar nuestro pasado.
No puedes desprenderte de mi
¡Eso me mata!

Enciendo un cigarro para
sentirme acompañado,
pero no basta
con un amigo imaginario que se esfuma
con tanta facilidad.

Es tan corto el amor
y tan largo el olvido
que se teje una telaraña
alrededor de mi cuerpo.
Me asfixia poco a poco.

Quisiera tener la fuerza.
Quisiera tener la voluntad.
Para dejar al menos
un dia de pensar en ti.

Quisiera poder odiarte.
Quisiera poder pensar en mi.
Pero por desgracia:
¡Todo me recuerda a ti!

Eran tantos los sueños
que nos alimentabamos de ellos
mientras la vida
se encargaba de traernos de vuelta
y nos azotaba con la cruda realidad.

Entregarte tanto
fue mi mala costumbre.
Pagan justos por pecadores,
en ese oficio me gradue con honores.
Maldita sea mi suerte.
Bendito mi nuevo existir.
Si contigo no he de vivir
no queda mas que dejar de sufrir.