La puerta de tu libertad

Es mentira...todo lo que dicen es mentira.

Dicen que todas las personas tienen la oportunidad
de no caer en muerte y ser inmortal.
Dicen que para ello una puerta han de hallar
y para entrar a ella una llave han de encontrar.
Dicen que en la llave habita el mal
y que cuando la coges 24 horas tendrás
para hallar tu puerta y en ella entrar,
pero antes de eso con el Diablo convatirás.

Dicen que tu llave se halla en tu corazón
y que para vencer al Diablo no hace falta fuerza ni acción.
Dicen que basta con conocimiento e imaginación
y que si lo vences será tu aliado hasta el final.

El Diablo ha entrado
en la puerta de tu libertad,
se ha aliado contigo
hasta la eternidad.
La fuerza de él aquí está! Dicen que si te aliadas con él serás invencible.
Dicen también que tus huesos serán irrompibles.
Dicen que en tu puerta se halla algo horrible:
serás inmortal, pero rehén de Satán.
Dicen que en tu corazón conservas una canción
que te cantaron cuando eras pequeño,
y que cuando la cantas todo el mundo cae en sueño.
Dicen que hay una legión de demonios en el cielo
y que tú a ellos les sirves a cambio de tu libertad.

El Diablo ha entrado
en la puerta de tu libertad,
se ha aliado contigo
hasta la eternidad.
La fuerza de él aquí está!

Te has vendido, ya no hay vuelta atrás,
has condenado a la humanidad.
Nunca encontraste
diferencia entre el bien y el mal.
Por favor, no des un paso más.

A la puerta de tu libertad has traiccionado,
creías haber encontrado tu libertad.
Nunca sabrás lo que hay en el otro lado:
intercambiaste el bien por el mal! En el cielo lloran por tu elección:
¿Quién te ha incitado a la traicción?
Fue Satanas, el dios de las mentiras.
Discipulo de él tú eres, por eso pagarás como debes:

Alma por alma,
sangre por sangre,
violencia, enemistad,
pobreza y hambre...
más de ello jamás oirás
cuando te enfrentes en la batalla final a Satán.

Una puerta cerrada, una llave extraviada,
un alma en el cielo y otra en la nada.
El poderio de Dios
contra la maldad de Astaroth.

Si el Diablo ha entrado
en la puerta de tu libertad,
si se ha aliado contigo hasta la eternidad;
si tienes en tu cuerpo
la fuerza de Leviatán,
no dudes y vete
a combatir contra la bondad.

Recuerda el pacto
que hicimos en el cielo:
no más hambre, enemistad
ni guerras en tu pueblo.
Tan solo tú sabes lo que hay que hacer:
Lucha contra él,
el mal nunca vencerá al bien!

Una batalla en la tierra que sorteará su destino,
el combate final entre Dios y enemigo.
Luces fuera!Entran en el ring ya
los representantes del bien y el mal.

Ya no hay vuelta atrás
ni más puertas de libertas.
El público, inconsciente,
apoya a la maldad
sin saber los acontecimientos que por ello acaecerán.

Comienza el combate
con trucos sucios del mal:
intenta convencer al bien
de que no vale la pena luchar
y que si se unen en uno
los dos gobernarán la humanidad.

El bien no hace caso
de las afirmaciones del mal.
Sabe que si lo ignora
el mal no podrá avanzar.
El bien, de echo coje
la espada de la justicia
y atraviesa con esta
al mal altruista!

Pocos fueron los que en el bien confiaron,
creen que si lo apoyan ahora
él los pondrá de su lado,
mas no saben lo que les espera por haber traiccionado
el nombre del padre, del hijo y del enviado.

Una espada venció y una puerta cayó,
el mal a la muerte fué y el bien el combate venció.
Unos pocos ganaron la libertad prometida,
mas muchos cayeron con Satán el suicida.

El Diablo ha entrado
en la puerta de tu libertad,
se ha aliado contigo
hasta la eternidad.
La fuerza de él aquí está!

Nunca entenderemos esas palabras:
el Diablo por ti no ha hecho nunca nada.
Cambiemos de himno y honremos a nuestro Dios,
que nos ha dado la libertad y la salvación.

"La espada de la justicia
ha vencido a la puerta de tu libertad.
Aclememos con himno a Dios
y con bucheros deshonremos a Satán.
Sabemos que el bien
significa libertad.
Ahora si podemos decir que
la fuerza de él aquí está!!!"