El sueño de don nadie

¿Quién dijo que todo te puede servir?
Díganme quién tiene guardados
los pasos que vas a elegir.

En el sueño de un nadie
hay agua, comida y calor
con el corazón en carne viva
quiere matar al dolor.

Aceptó con orgullo y resignación
aunque las reglas del juego
ya no estén a su favor
sube al cole y su mundo
comienza a parir
cada paisaje que el viaje
le da no lo deja vivir.

Como la soledad
que precede al descuido
en un soplo de tiempo, sonríe
y no te puede olvidar.

Masticando entre vidrios
los litros, el celo
y dolor que lastima
entre el desamor y el espanto
de otro Domingo así.

En el barro se mueve
entre el cielo e infierno; el azar
en cualquier parte y momento
alguno te vas a cruzar.

Sube al cole y su lucha
comienza a latir
y el paisaje le avisa que el viaje
ya llega a su fin.

Como la soledad
que precede al descuido
en un soplo del tiempo, sonríe
y no te puede olvidar.

Masticando entre vidrios
los litros, el celo
y dolor que lastima
entre el desamor y el espanto
de otro Domingo así.

Como la soledad
y gritos de Domingo
el sueño de Don Nadie se pinta
con tu parte más gris.