Dios seguridad

Cuanto más fácil que olvidarte entre el montón, es encontrarte.
La conciencia nunca escapa del temor.
Si escucho a la ciudad de fondo que te grita que no escapes.
Que sus garras son amigas del confort.
Ojos cegados de armonía, cuando todo es utopía.
Lo posible como única verdad.
Un pie en el borde de la cuerda, sentir que todos te observan.
La sangre ahuyenta más que la crueldad.

Otro transa que te araña la ilusión.
Otra corbata ahorcando sueños, otra seria institución.
Vamos a matar, a desterrar, al Dios seguridad.

¿Cuánto ofrecen por tu risa, corazón?
Si tu llanto cobra vida en mi canción.
¿Cuánto vale ser la rubia del lugar?
Si en la tapa está tu sombra al despertar.

Van casi perfectos.
Marcando sus cartas.
Su biblia es tu miedo.
Su templo, tu karma.
Van casi perfectos.
Yo arriesgo mi calma.
Me entrego al deseo.
Mi risa los sangra.