Adiós

Me dice adiós antes de marcharse,
Le ruego por favor que no se vaya,
Me agarra y me ayuda a limpiarme,
El barro de mis rodillas de arrodillarme,
Le pido que se quede de nuevo,
Que nunca podré olvidarle,
Me grita que es tarde, que estoy viviendo en las estrellas,
Le grito que bajo a veces a verle a ella,
Me aprieta fuerte, sus uñan se clavan y envenenan,
Le digo que me está haciendo daño,
Me dice que ya no le apena,
Rodeo su cintura, como un candado,
Me suelta el nudo marinero que hice con mis manos, tras su espalda,
Me dice que no le hago falta,
Me miente, sé que está mintiendo, le digo que está siendo falsa,
Me dice que basta, que ya no está conmigo,
Luego sonríe y me propone ser amigos... eso es imposible.
Le digo que voy a intentarlo, como siempre,
Le digo una cosa mientras pienso en veinte,
Me dice que no estoy oyendo, que estoy de nuevo en las estrellas,
Le confieso que a veces viajo por ellas, que soy espacial,
Me pone mi cabeza contra su cabeza,
Y dice que se marcha para que yo pueda volar,
Le digo puedes venirte conmigo,
Me dice que no quiere irse,
Le digo que recordaré su ombligo,
Me dio el ultimo beso y nadie fue testigo,
No pude decir nada después por eso ahora lo escribo.

Me llama al IPhone y dice que me quiere,
Le digo que ya estoy con otra, que es mentira, pero duele.
Que han pasado 3 años, que como se atreve,
Me llora diciendo que nunca es tarde, la misma de el "ya es tarde nene",
Dice "que no es tarde", le digo si es tarde y viene,
Con buenos recuerdos que hacen que me queme,
Le ruego que me deje, me ruega que no y rechazo,
Le digo que ya no la quiero,
Me dice que estoy siendo falso,
Le cuelgo en el iPhone, ¿ahora a que viene?,
Re-llama y vuelvo a descolgarlo, digo ¿Qué quieres?
¿Qué vienes a recuperarlo? por que no puedes,
Me dice que el tiempo es muy largo y que no me niegue,
Me dice que todo este tiempo ha pensado en como estaba,
Le digo ¿Cuántas pollas has chupado mientras pensabas?
Luego me llama capullo y,
Luego yo le llamo zorra,
Después fue un murmullo y,
Luego silencio y a otra cosa.
Después de un minuto llorando sin decirnos nada,
Le cuento que no se hace fuego de ramas quemadas,
Que el tiempo borra las cenizas como el viento,
Me dice lo siento, le digo que no siente nada,
Que a mi no me engaña, que su llamada ya me estorba,
Dijo adiós pero esta vez antes de colgar soltó la bomba:
"Te vas a arrepentir" me dijo la muy zorra,
Y respondí: "¿Como ahora te arrepientes tú? No, eso me sobra".